Esta fascinación por las montañas ha permanecido, debido a sus paisajes, biodiversidad, cascadas y el aire limpio que de ellas emana. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente señala que actualmente el 20% del Turismo, se orienta al turismo de montaña.
También puedes leer: ¿Qué será que tiene Cuenca que nos enamora?
Las montañas suponen casi un cuarto de las zonas terrestres del planeta, abarcando los cinco continentes y son el hogar del al menos el 12% de la población humana. La biodiversidad de los ecosistemas montañosos y sus paisajes representan valores de conservación.
Las montañas son fuente de aproximadamente el 80% de los suministros de agua dulce y proporcionan productos alimenticios, minerales, madereros e hidroelectricidad, a más de la mitad de la población mundial. Es por esta razón que el turismo rural y de montaña debe asegurar el cuidado de la biodiversidad que existe en las zonas y generar un beneficio a las comunidades aledañas.
En las montañas se puede realizar caminatas, senderismo, ciclismo, montar a caballo, escalada, cannoping y más. El experto señala que para elegir el destino donde desarrollar estas actividades, el turista se cuestiona: ¿cómo llegar? ¿dónde me hospedo? ¿dónde me alimento? y ¿qué actividades puedo realizar? Estas interrogantes se responden a través de planes turísticos que vinculen a comunidades cercanas a las zonas montañosas.
Al trabajar junto a una comunidad, el prestador de servicios turísticos puede ofertar un mayor número de actividades, como rutas gastronómicas, recorridos en caballo, actividades religiosas, culturales y más, lo que genera desarrollo local y por ende nacional. Así, el país continúa fortaleciendo su representatividad como destino líder de turismo por su paisajes e interculturalidad.
Fuente: Noticias UTPL